Dicen que Rojals es el pueblo más alto de la Costa Daurada, cuando llegas a él un soplo de aire fresco te acaricia, porque se encuentra en el extremo noreste de las Muntanyes de Prades: rodeado de bosques espectaculares y senderos que te cautivarán para vivir la naturaleza en estado puro.
Rojals forma parte del conjunto de Montblanc y su corazón late en el centro histórico. En la calle Mayor descubre el interior de la iglesia de Sant Miquel encontrarás un artesonado policromado que es único. Se representan figuras místicas y algunos de los escudos de las familias que más poder tuvieron durante la edad media. ¿Los conoces?
Seis denominaciones de origen abrazan los vinos tranquilos y espumosos que se elaboran en la Costa Daurada, el único territorio del Estado que aúna tantas DO. ¿Nos acompañáis a descubrirlas y catar sus paisajes únicos?
La Costa Daurada es un territorio con unos paisajes increíbles, llenos de contrastes y de una belleza perfecta. Rocas rojizas en su interior se levantan de puntillas para ver el mar o se convierten en las mejores atalayas para ver despuntar o ponerse el sol. Prados convertidos en alfombras de colores, arquitecturas que atestiguan el paso de antiguas civilizaciones o que son la huella de un estilo único e intransferible de estas tierras, el modernismo. O espacios naturales de una gran armonía que nos reconcilian con la madre Tierra.
Hoy os mostramos seis lugares 'instagrameables' de la Costa Daurada, uno por comarca, para que cuando vayáis, capturéis imágenes únicas e intransferibles.
¿Os apasiona escaparos y vivir experiencias únicas en familiar? Entonces la Costa Daurada es vuestro destino. ¿Sabíais que cinco municipios de la costa están acreditados como Destino Familiar? Pues sí, y eso significa que en ellos encontraréis todo lo necesario para que vuestra familia viva una escapada ideal.
Los ‘castells’ son una pasión única y genuina de Cataluña, hoy extendida por todo el país, pero que tiene su kilómetro cero en Valls, en la comarca del Alt Camp. Los ‘castells’ son pasión, emoción, plasticidad... ¿Quién no se ha emocionado al ver, por primera vez, cómo se levanta un ‘castell’? Los ‘castells’ fueron declarados Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO por su singularidad, que los hace únicos en el mundo. Hoy te proponemos un recorrido por las principales plazas castelleras de la Costa Daurada, en las que podrás disfrutar de esta ancestral tradición.
El Alt Camp es una comarca ubicada en la Costa Daurada y la conforman distintos pueblos llenos de historia. Te animamos a pasar un día en familia y a descubrir todos los rincones y paisajes llenos de viñedos que, ten por seguro, te enamoraran.
Conca de Barberà es una zona con una gran tradición vinícola, gracias a la ubicación y a su tierra. Para entender la actualidad tenemos que dar un salto al pasado, y es que la evolución de la viticultura en la Conca de Barberà ha ido muy ligada a la evolución histórica de la comarca. Nos remontamos a la Edad Media, cuando dos instituciones, los monjes cistercienses de la abadía de Santa María de Poblet y los monjes guerreros de los Templarios, transmitieron a los agricultores sus conocimientos y experiencias con tal de cultivar los viñedos y extraer los mejores vinos.
La Costa Daurada es cultura, historia, naturaleza y mucho más. A nivel arquitectónico, pero, es indispensable hablar de las Catedrales del Vino, que forman parte del patrimonio más destacable de la tradición vitivinícola del territorio.
El río Siurana, el río Brugent y el río Glorieta han serrado con el paso de los siglos la orografía de unas montañas con gran atractivo natural. Ponte en marcha y apúntate con esta TripIdea a descubrir con criaturas el patrimonio de las Muntanyes de Prades. Están certificadas como destino de Turismo Familiar y esto quiere decir que todo es mucho más fácil si quieres hacer una visita con los pequeños de la casa.
La ciudad roja es un buen punto de partida para esta salida. Así es como se conoce el pueblo de Prades, por el color omnipresente en las construcciones de piedra de este municipio de la Costa Daurada. Camina por los callejones estrechos y llega a la plaza porticada de la villa, donde encontrarás una singular fuente renacentista al pie de una majestuosa iglesia. Hay empresas que en pleno verano organizan gincanas para descubrir Prades en familia y de una manera muy divertida. Os dividiréis en dos grupos y deberéis resolver algunas incógnitas para ganar esta didáctica competición.
Si quieres hacer una excursión corta la más indicada y bonita es la de la Ermita de la Abellera, a unos 2 kilómetros del municipio. El edificio, del 1570, está incrustado en un risco de piedra aprovechando una cueva natural. Desde sus laterales las vistas de estos valles -la más próxima es el valle del río Brugent- son para quedarse abstraído un buen rato.
Un cielo claro y lleno de estrellas
Otra de las particularidades de las Muntanyes de Prades y de la Serra de Montsant es que desde el año 2021, es el territorio más grande a nivel europeo protegido de la contaminación lumínica. El Parc Natural de la Serra de Montsant es el punto de referencia de los cielos oscuros. Todo en este territorio ha sido declarado como Destinación Turística Starlight por la excelente calidad de su cielo nocturno. Además, los guías del Parc Astronòmic Muntanyes de Prades son guías acreditados por la Fundación Starlight. También han participado en la certificación de centenares de nuevos monitores y guías astronómicos starlight.
Entras en el túnel del tiempo y apareces en la Estación de Francia de Barcelona. Estás en los años 60, cuando el país apenas comienza a recuperar el pulso tras una larguísima posguerra. Tienes un billete para un tren radiante del que todo el mundo habla en la ciudad, el Talgo, el ferrocarril más innovador del momento. El tren hoy tiene como destino Tarragona, en la Costa Daurada. De prisa, sube, ¡que el jefe de estación ya ha hecho sonar el silbato!
De mayo a octubre, el Tarraco Talgo, esta original propuesta de turismo vintage, sale cada sábado con el argumento de llevar los viajeros hasta una de las ciudades más monumentales de Cataluña. Pero la experiencia, aparte del destino, lo vale también por el trayecto. El interior y el exterior de este Talgo III RD te hace retroceder cincuenta años en el tiempo.