El río Siurana, el río Brugent y el río Glorieta han serrado con el paso de los siglos la orografía de unas montañas con gran atractivo natural. Ponte en marcha y apúntate con esta TripIdea a descubrir con criaturas el patrimonio de las Muntanyes de Prades. Están certificadas como destino de Turismo Familiar y esto quiere decir que todo es mucho más fácil si quieres hacer una visita con los pequeños de la casa.
La ciudad roja es un buen punto de partida para esta salida. Así es como se conoce el pueblo de Prades, por el color omnipresente en las construcciones de piedra de este municipio de la Costa Daurada. Camina por los callejones estrechos y llega a la plaza porticada de la villa, donde encontrarás una singular fuente renacentista al pie de una majestuosa iglesia. Hay empresas que en pleno verano organizan gincanas para descubrir Prades en familia y de una manera muy divertida. Os dividiréis en dos grupos y deberéis resolver algunas incógnitas para ganar esta didáctica competición.
Si quieres hacer una excursión corta la más indicada y bonita es la de la Ermita de la Abellera, a unos 2 kilómetros del municipio. El edificio, del 1570, está incrustado en un risco de piedra aprovechando una cueva natural. Desde sus laterales las vistas de estos valles -la más próxima es el valle del río Brugent- son para quedarse abstraído un buen rato.
Entras en el túnel del tiempo y apareces en la Estación de Francia de Barcelona. Estás en los años 60, cuando el país apenas comienza a recuperar el pulso tras una larguísima posguerra. Tienes un billete para un tren radiante del que todo el mundo habla en la ciudad, el Talgo, el ferrocarril más innovador del momento. El tren hoy tiene como destino Tarragona, en la Costa Daurada. De prisa, sube, ¡que el jefe de estación ya ha hecho sonar el silbato!
De mayo a octubre, el Tarraco Talgo, esta original propuesta de turismo vintage, sale cada sábado con el argumento de llevar los viajeros hasta una de las ciudades más monumentales de Cataluña. Pero la experiencia, aparte del destino, lo vale también por el trayecto. El interior y el exterior de este Talgo III RD te hace retroceder cincuenta años en el tiempo.
De las tierras del Priorat es bien sabido que desde hace siglos sale un buen vino. Pero ya ha caído más en el olvido que la geología de la región ha dado otro producto de alto valor industrial: el plomo. Empezamos esta TripIdea en las minas de plomo más importantes de Cataluña durante un siglo, las de Bellmunt del Priorat.
Es como si hubieras abandonado los niños en medio de la selva y ellos tuvieran el reto de salir adelante superando pruebas en plena naturaleza. No es una pesadilla, es más bien lo contrario, una aventura infantil divertidísima que tiene un nombre y muchos ya lo conocen: Jungle Trek, un parque de ocio en la Costa Daurada que está integrado dentro del bosque.
Salta por las tirolinas, intenta mantener el equilibrio en los troncos móviles, supera el paso de la araña, aférrate a las lianas de Tarzán, ¡e incluso haz de funambulista paseando por una cuerda a 10 metros de altura! Jungle Treck ofrece a los niños a partir de 4 años y a los adultos más salvajes una oportunidad para disfrutar de las aventuras de 6 circuitos de varias dificultades. Sólo se requiere la presencia de un adulto con cada grupo de niños para que, junto con los monitores del espacio perfectamente entrenados, garanticen la seguridad de las instalaciones. ¡Perder tus hijos por la selva del Jungle Treck es una experiencia familiar que te llenará de buen humor!
Pocas ciudades del país están tan preparadas como Cambrils para recibir a los amantes de la bicicleta. Muchos hoteles disponen de aparcamientos para las bicis, hay espacios de limpieza y talleres para las bicis y menús especiales para deportistas. Si eres un gran aficionado o simplemente un dominguero de las dos ruedas, pedalea, ¡que estás en la Costa Daurada!
En la Oficina de Turismo de Cambrils te darán un plano con todos los carriles bici y caminos del término municipal. Es una herramienta perfecta para conocer la parte más rural del pueblo pedaleando en familia: campos cultivados, arroyos, riachuelos, senderos... Cuentan con una red de caminos que te permite llegar hasta Montbrió y Mont-roig del Camp en rutas alternativas a las carreteras principales.
Cerca del mar, la salida más tranquila que puedes hacer en bicicleta es la del Passeig Marítim, en dirección a Salou. En total son 9 kilómetros de carril bici con servicios como bares y restaurantes muy cerca. En verano, vale la pena evitar las horas de máxima irradiación del sol si no quieres caer desplomado de tanto calor. Eso sí, si llevas el bañador puesto, ¡siempre puedes hacer una parada con baño incluido!
Nació en Torredembarra uno de los catalanes que más éxito cosechó haciendo las américas en el siglo XIX. Joan Güell fue pionero en la industrialización catalana y es uno de los indianos más famosos y polémicos de Cataluña. Fundó la Maquinista Terrestre y Marítima - la gran empresa catalana de la Revolución Industrial - y sus herederos fueron los fieles mecenas del arquitecto Antoni Gaudí. Güell dejó huella en Cuba y en toda Cataluña. Y en esta TripIdea queremos invitarte a seguir el rastro que él y el resto de indianos han dejado en este pueblo de la Costa Daurada.
El tercer fin de semana de septiembre, Torredembarra celebra la Feria de los Indianos, en la que las calles del casco antiguo vuelven a la era de los aventureros económicos de las américas. Habaneras, ron, bailes de salsa, vestidos caribeños... Te parecerá haber aterrizado en la Cuba de principios del siglo XX sin moverte de la Costa Daurada. Es una buena ocasión para entrar en la Torre de la Vila -origen de la ciudad- y descubrir sus reminiscencias indianas. Cuando te canses de dar vueltas, un buen café cubano te trasladará a las plantaciones de café del Caribe. Y no olvides ir a la moda cubriéndote del sol con el clásico sombrero panameño.
"Reus, París, Londres!", exclaman los locales para sacar pecho y situar la ciudad a la altura de grandes capitales europeas. La retranca popular hace referencia a las tres lonjas del continente donde se fijaba el precio del aguardiente en el pasado y dice mucho del espíritu optimista de los reusenses, que sacan la fiesta que llevan dentro en las grandes ocasiones. ¡Uniros a una buena celebración en la Costa Daurada con esta TripIdea!
Las fiestas de Sant Pere de Reus, que se celebran a finales de junio, tienen una historia de más de 400 años. La imagen -o mejor dicho el sonido- que más cautiva a nuevos y habituales es sin duda la tronada. En la plaza del Mercadal no cabe un alfiler para ver y oír el chasquido aterrador que sirve para abrir la fiesta en la Costa Daurada. Nada que envidiar al chupinazo de los Sanfermines; en Reus, los truenos y los morteros, que aquí resuenan a ras de tierra, despiertan la emoción contenida durante todo el año.
La tronada (la tormenta) se repite hasta cuatro veces durante la fiesta mayor. Los días de homenaje al patrón de la ciudad están centrados en la procesión con la imagen de San Pedro y la salida a la calle de la mula, el dragón, el águila, los gigantes... Encontrarás cada día fiesta tradicional y popular, con jornadas castelleras incluidas. ¡Súmate! Para vivirlo acompaña la fiesta con la bebida local, el vermut, con decenas de variedades servidas en los locales de la ciudad.
El Imperio Romano aún no ha caído. Su bastión en pleno siglo XXI es Tarragona y da la impresión de que el emperador Augusto todavía gobierna. El anfiteatro, el circo, las murallas, el pretorio, el acueducto, el foro y el ayuntamiento viven la emoción de los días más gloriosos de Tarraco. Bienvenidos al Tarragona Historia Viva de la Costa Daurada, una propuesta veraniega de recreación histórica que te transporta con toda la familia a la vida de hace más de 2000 años en estas tierras.
Es sobre todo los fines de semana, de mediados de julio a septiembre, cuando la Tarragona reaviva su esplendor romano en las ruinas que hay repartidas por la ciudad como escenario. Te convertirás en legionario, deberás ingeniártelas para descubrir los enigmas romanos escondidos en los monumentos, asistirás al asesinato del César y a la representación de las marionetas de Marco Antonio y Cleopatra, probarás las mejores recetas romanas... Todo ello en un programa completísimo para aprender con familia o amigos como era la vida en la segunda ciudad más importante del Imperio Romano, Tarraco.
Calafell es un buen lugar para pasar unas vacaciones tranquilas o incluso una período de descanso en tu vida. Esto ya lo tuvieron muy claro los pobladores de estas tierras desde algunos milenios atrás. Y es que aquí hubo uno de los principales asentamientos de íberos de la península hacia el 500 a.C. Pertenecían a la tribu de los cosetanos, hoy homenajeados cada verano en el festival Ibercalafell, el Festival de la Tierra Ibérica. Divulga el mundo de los íberos entre los niños y los adultos y se celebra durante la primera quincena de agosto.
Una de las actividades del festival te propone buscar por el bosque cualquier elemento que pueda convertirse en pintura para diseñar tu propio vestido ibérico. En el núcleo antiguo se hacen representaciones de la época mientras en la Ciudadela Ibérica, en las afueras del pueblo, se hacen la mayoría de talleres: de elaboración de pan, de acuñación de monedas, de los oficios más antiguos de estas tierras, charlas divulgativas ... El festival se cierra con una noche de fuego, elemento cotidiano de los íberos y al mismo tiempo elemento omnipresente en los rituales de esta civilización.
El convento de Bellpuig, los monasterios de Poblet, Santes Creus, o Vallbona de les Monges convertidos en un escenario musical de excepción. ¿Te lo imaginas? Hace años que es una realidad gracias al ciclo de conciertos de la Ruta del Cister, que tienen lugar las noches de verano en estos espacios cargados de historia.
La programación suele mezclar varios estilos musicales: el jazz, el pop, el gospel o la música clásica. Un cuarteto de cuerda tocando entre las paredes del monasterio de Santes Creus no suena igual que en una sala de conciertos. La experiencia de los conciertos cistercienses -son todos las noches de los sábados de verano- también es apta para menores y si tienen menos de 7 años, la entrada es gratuita. En su web puedes reservar las entradas y consultar la programación de este ciclo de conciertos de la Costa Daurada.