Patrimonio de la Humanidad Romanidad
Murallas Paseo Arqueológico
En su origen de madera, la muralla de piedra se construyó en el siglo II aC y fue la primera gran obra arquitectónica de Tarraco. Actualmente es la construcción de origen romano más antigua de todas las conservadas fuera de Italia. Tenía una longitud de 3.500 metros, de los que sólo conservamos 1.100 metres, con torres altes de defensa de les que destacamos la del Arzobispo y la de Minerva -con el relieve e inscripción romanas más antiguas de la Península Ibérica-. Fue reforzada entre los siglos XVI y XVIII para adaptarla a las guerras y los ataques piratas. Actualmente circunda el casco antiguo. Las Murallas/Paseo Arqueológico está gestionado por el Museo de Historia de Tarragona y forma parte del conjunto arqueológico de la Tarraco Romana, que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 2000.